Imagen extraída de: https://www.istockphoto.com/es/foto/concepto-de-jaula-de-libertad-gm1125554272-295934743
Crecimos
entre basura. Y la ciudad cansada nos ha confundido hasta el punto de no saber
quiénes somos.
El reloj avanzaba excitando a la prisa y abalanzándose sobre nuestras vidas. Nadie nos enseñó a gestionarnos los miedos, a conocernos a nosotros mismos, a vernos reflejados en el espejo y reconocernos.
Crecimos en una jaula rodeados de un juzgado que nos miraba atentamente. Y así se hace imposible no odiar, no odiarte.
El universo nos ha dado la espalda, nos vigila, nos maltrata. Nos han hecho a medida de algo que no queremos ser. Y lo más fácil es que el día que escapemos, rompamos con todo. Que al salir sólo queramos correr y gritar, sin tener ni idea de adonde ir, sin saber qué hay más allá, pero con el absoluto convencimiento de que hay mucho más.
Y teniendo claro que no vamos a volver jamás.
El reloj avanzaba excitando a la prisa y abalanzándose sobre nuestras vidas. Nadie nos enseñó a gestionarnos los miedos, a conocernos a nosotros mismos, a vernos reflejados en el espejo y reconocernos.
Crecimos en una jaula rodeados de un juzgado que nos miraba atentamente. Y así se hace imposible no odiar, no odiarte.
El universo nos ha dado la espalda, nos vigila, nos maltrata. Nos han hecho a medida de algo que no queremos ser. Y lo más fácil es que el día que escapemos, rompamos con todo. Que al salir sólo queramos correr y gritar, sin tener ni idea de adonde ir, sin saber qué hay más allá, pero con el absoluto convencimiento de que hay mucho más.
Y teniendo claro que no vamos a volver jamás.
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