Arrancarte los miedos de cuajo,
y de
paso, disipar los míos
¡Destruyámoslos!
sin
temor y sin ningún cuidado…
Quememos
todos nuestros demonios,
aprovechemos
las llamas del infierno
y que
yo solo quiero arder
a fuego
lento contigo.
Que
cuando amenace tormenta
se
deshaga la borrasca enredado en tu pelo,
con mis
ojos clavados en los tuyos
en
simbiosis perfecta,
meterme
tus risillas juguetonas
en mis
venas abiertas.
Incrustada
entre ceja y ceja,
obsesión
controlada hasta que te coma la boca,
descontrol
obsceno si te quito la ropa.
No te
quiero mía, ni mucho menos,
solo
quiero descubrirte,
que
fluya hasta que desborde,
que
rebose por donde sea.
Mantente
tranquila si cubre,
nos
pondremos las botas de agua
y un
chubasquero impermeable a los malos recuerdos.
Que me
pille tratando de morderte el cuello,
asimilando
rápido,
jugando
con fuego.
Acabemos
a flote o ahogados,
sin
dudarlo un segundo,
pequeña hater,
pequeña hater,
yo me
la juego contigo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario